Observa el chocolate. ¿Tiene manchas blancas? Eso podría indicar que durante el proceso de elaboración la grasa se separó del cacao, y es muy probable que sus características estén alteradas. Un buen chocolate tiene un aspecto brillante. Si no hay defectos obvios, observa el color.
Rompe un pedazo, se debe escuchar un golpe seco, esto es otra señal de que es un chocolate bien templado. Al romper el chocolate se liberan aromas, y al olerlos te darás una idea más clara de lo que estás a punto de probar.
Coloca un pequeño trozo de chocolate en la lengua, y no lo muerdas. La clave es dejar que se derrita lentamente en la lengua. Un chocolate de buena calidad, se debe derretir justo por encima de la temperatura corporal, así que en pocos segundos empezara a derretirse, conforme se derrite, empezará a liberar sabores.Un buen chocolate dejará un sabor duradero en la boca que puede durar varios minutos después de que el chocolate se haya derretido.
Otra cosa que debes considerar es la textura del chocolate. Si te deja una sensación grasosa en la boca, lo más probable es que se utilizó una buena cantidad de manteca de cacao.